jueves, 30 de diciembre de 2010

SOLEDAD Y YO (1995)

















Soledad y yo,
incansables compañeras,
si asustada huyo,
en silencio ella espera.

Entre elogios y reproches,
en amor y odio inmersas,
tejen sus dedos los broches
de tantas noches inciertas.

Soledad y yo,
un poema entre dos velas,
al acercarme al abismo,
ella afloja las espuelas.

Tras complejos laberintos,
la evito y vuelvo a buscarla
y en tinta de lágrimas pinto
versos de amor en sus palmas.

Soledad y yo,
inseparables y eternas,
me regala sus silencios
y llena mi vida de ausencias.


Sahida Hamido

2 comentarios:

  1. Es triste y melancólico al mismo tiempo... Conseguiste dar un efecto de desengaño, me parece que el final le quita honra a las primeras estrofas... MUY BUENO!!!! EXCELENTE!!!

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  2. Muchas gracias, Dann, por visitarme y comentar. He optado por no modificar los poemas y publicarlos tal como los escribí y registré aunque ya tengan años. Me alegra que te haya gustado. Un abrazo!

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